NOTAS A PIE DE INSTANTE
Notas a pie de instante toca con delicadeza y honestidad casi escandalosa asuntos que no suelen ser enunciados. Acaso escandalice a los beatos de lo intrascendente. Lejos de la bisutería espiritual, donde la búsqueda de la otredad se rodea de budas de plástico, Montiel se toma muy en serio su forma de estar y el vínculo con lo sagrado.
No estamos, por fortuna, ante una impostura aromatizada con barritas de sándalo sino ante un texto que se resiste al encasillamiento de los géneros. Ya lo advirtió Borges; clasificar no es entender. Son, precisamente, los libros que crean su propio género literario, por así decir, una singularidad que me atrae sin remedio. Son flores raras, libres, heterodoxas. En Notas a pie de instante hay reflexiones, aforismos, epifanías cotidianas, fogonazos, anécdotas que recuerdan a un breve dietario, jirones autobiográficos… Todo está destilado hasta la máxima condensación.
La poética de Montiel puede resumirse en esta frase que me hubiese gustado escribir a mí: «No para escaparme de la realidad: escribir para que la realidad no se me escape.» He aquí todo un proyecto de vida.
Juan Gracia Armendáriz