LOS MUERTOS NO COMEN YOGURES
Durante el peor invierno que Madrid recuerda en décadas, la extraña desaparición del vecino de Pier Luigi Zunzunegui origina que éste, junto con su excéntrico compañero Walter Porfirio Cortés, comiencen a husmear en la comunidad. Lo que parecía una simple investigación vecinal de un guardia de seguridad con ínfulas de detective se complica cuando se encuentran con un cadáver inesperado.
Un amor platónico, vecinos furiosos, una investigación policial en marcha, personajes de la farándula, bellas mujeres, madrileños de a pie… son los componentes de esta disparatada aventura «casi» policial que gustará tanto a los amantes de las comedias de enredo más desternillantes como a aquellos apasionados de la novela negra clásica.