LOS ÚLTIMOS DÍAS DEL ESPANTAPÁJAROS
A la pérdida es a lo que estáis encadenados. A pesar de los eslabones del progreso que cuelgan de vuestras manos, de vuestras carótidas estrechas.
Así fingimos vivir, día a día a día. Es un hecho. Más que una sospecha. Y, por tanto, así nos lo cuenta Sergio, sirviéndose para ello del lenguaje de la auténtica vida, esa que llega al desactivar el descontento por nuestra condena. En ese sentido, Los últimos días del espantapájaros, como mapa, es una paradoja que nos habla de nuestro falso (aunque funcional) nosotros y nuestros artificiales (e incomodísimos, aunque hechos a medida) territorios sensibles en el simulacro (…) Este libro interrumpe la programación habitual al activar la súper-consciencia de esta. Manéjalo, pues, con infinita cautela. Duerme en él.
Francisco Jota-Pérez